La esencia floral Yarrow (Milenrama blanca, Aquilea) trabaja sobre la limpieza y la protección del campo etérico. Refuerza el aura de las personas de manera que las influencias externas no puedan ganar terreno. Protege de todo aquello que nos asalta y nos apesadumbra, haciéndonos sentir vulnerables. Es un escudo psíquico, físico y del alma para no sucumbir con facilidad ni absorber demasiado, intoxicándonos con las influencias negativas del entorno. Yarrow (Milenrama blanca, Aquilea) es aconsejable para niños que pueden estar desprotegidos de su entorno o en ambientes donde hay mucha tensión o disputas, y que a veces reaccionan a las influencias externas adversas con síntomas físicos, llanto, hiperactividad o falta de concentración. También es de ayuda en personas que pasan por períodos de mucha sensibilidad o debilidad (embarazo, crisis, rupturas matrimoniales, separaciones).
Ideal para terapeutas que trabajan con pacientes muy graves, enfermos mentales, discapacitados, depresivos, terminales les permite ser sensibles sin absorber. Yarrow limpia, da pureza y restituye la fortaleza sanadora de nuestro interior capacitándonos para dar un giro a nuestra vida. La flor, literalmente remienda el aura y equilibra la energía de los centros superiores, conectándose con los inferiores.

Relacionado con vulnerabilidad, excesiva permeabilidad energética.