Dune Primrose (Prímula de las Dunas) es una esencia ideal para aquellas personas que no sólo sienten alienación con respecto a las relaciones humanas, sino a un nivel más trascendente, para un sentimiento de ser abandonado por lo divino, por la vida. Un pensamiento típico que tiene interiorizado quién necesita esta esencia es: “si Dios me amara, esto no me hubiera sucedido“. Esta esencia floral abre el corazón para que el individuo pueda darse cuenta que en realidad hay amor en su vida y se pueda percatar de la presencia de personas benéficas a su alrededor. Aporta fortaleza de espíritu a pesar de la angustia, el abandono, la crueldad o el trauma. Dune Primrose (Prímula de las Dunas) puede ser útil para personas de todas las edades, pero es especialmente valioso para los profesionales que trabajan en lugares de pobreza y violencia, ya que permite sanar el alma a un nivel profundo para evitar que se intensifique el ciclo de destrucción y desesperación. Es una esencia muy apreciada por los terapeutas que trabajan con niños necesitados de ayuda, como delincuentes juveniles, niños de acogida o bebés abandonados. Esta flor también está indicada para niños y adultos jóvenes con dificultades de aprendizaje o falta de integración social, en donde se requiere una mayor dosis de conexión y calidez humanas.

Relacionado con profundo sentimiento de abandono, desesperanza ante la vida.